Entre pólizas y fermentadores

FAPASA

Asegurando Digital entrevistó a Juan Jaramillo, Productor Asesor de Seguros oriundo de Neuquén Capital, que actualmente reside en Bariloche. Comenzó en el mundo del seguro a los 15 años y con el tiempo construyó una sólida trayectoria que lo llevó a convertirse en organizador con presencia en distintas provincias del país. Pero además de su vocación profesional, este colega encontró en la elaboración de cerveza artesanal una pasión paralela, que cultiva con esfuerzo y dedicación hace más de una década.

¿Cómo comenzaste tu carrera en el mundo de los seguros y qué te motivó a dedicarte a esta industria?

Mi carrera en los seguros comenzó cuando tenía 15 años en Neuquén Capital, de donde soy oriundo, en las vacaciones de verano quería tener mis ingresos y mi papá me vinculó con su productor de seguros en ese momento, el cual me dio diversas tareas y capacitaciones para comenzar en el negocio. En esa época vendía pólizas a los vecinos, profesores del colegio y compañeros de trabajo de mis padres.

Luego me vine a vivir a Bariloche, donde fui a estudiar en la universidad la carrera de Contador Público, y para costear los estudios trabajé en varios bancos.

Me tocó estar dentro del circuito bancario en el 2002, fecha fatídica para la economía argentina, en la cual los bancos se convirtieron en agentes institorios. Esto hizo que volviera a comercializar pólizas, dado que los bancos vivían de la compra y venta de moneda extranjera y de venta de seguros. En ese momento estaba trabajando dentro del Citibank y, dos años después, atendí a un productor en mi escritorio. Eso motivó mi salida del circuito bancario y saqué la matrícula de productor, hasta la actualidad. Luego pude alquilar mi oficina y así comenzar a conocer gente que hoy hace que me convierta en organizador de seguros, teniendo productores en CABA, Neuquén, San Martín de los Andes, Junín de los Andes y en Chubut.

¿Qué desafíos recordás de tus primeros años como Productor de Seguros y cómo los superaste?

Obviamente, armar mi cartera desde cero y poder vivir de la profesión. Esto hizo que, a su vez, estudiara cocina profesional, recibiéndome de cocinero (chef), con lo que fui alternando las dos profesiones para poder pagar mis gastos.

Fueron años duros, de caminar y golpear puertas ofreciendo pólizas. Tenía las armas de haber trabajado comercialmente en un banco europeo (BNL) y en uno americano (Citibank), donde también armé cartera con ex clientes.

LA CERVEZA

¿Cómo nació tu interés por la fabricación de cerveza artesanal y en qué momento decidiste convertir esa pasión en una actividad concreta?

Trabajé varios años en cocina. Eso hizo que todo fuera más fácil y me dio la alquimia para poder mezclar los ingredientes.

Lo que hizo que iniciara fue una tarde que salimos de jugar un partido de rugby y fuimos al tercer tiempo. Tomamos una cerveza artesanal (hace 12 años aproximadamente) en un bar de Bariloche y estaba realmente bastante mala. Pero como era algo nuevo, la gente la consumía. Eso hizo que les dijera a mis amigos que comenzaría a hacer una cerveza que iba a ser mejor que esa.

Fui adquiriendo práctica, comprando insumos (a un cliente de mi cartera de seguros), quien me enseñó muchas cosas sin darse cuenta: la cervecería Epulafquen de Villa La Angostura. Luego hice un curso de manejo de levaduras en el Conicet, que me abrió la cabeza.

“Hasta el día de hoy sigo haciendo cervezas que me gustaría tomar”

Cuando se me dio por iniciar la comercialización fue cuando estaba construyendo mi casa. Al no poder acceder al sistema crediticio por falta de créditos hipotecarios, un amigo me dijo: “Tu cerveza es buenísima, los lúpulos te van a dar la casa que vos querés.” Ese fue el puntapié.

Pero lo que más me motivó fue que, al crecer mi cartera de seguros y al ver el mercado en pleno auge de la cerveza y tantos competidores, me dediqué a hacer cervezas más experimentales y a perfilar sabores y gustos. Cervezas que me gustaría tomar cuando me sentara en algún bar. Hasta el día de hoy sigo haciendo cervezas. ¡Luego te haré llegar algunas!

¿Cómo equilibrás tu trabajo en el mundo de los seguros con la producción de cerveza artesanal?

Hoy estoy full time con la actividad aseguradora. Durante varios años estuve con la producción y comercializando barriles a bares y restaurantes, incluso enviando a bares en Neuquén Capital. Y con la notebook abierta, emitiendo pólizas y sumando nuevos negocios. 

Eran jornadas agotadoras pero muy gratificantes. Hoy en día, la industria cervecera está planchada. Hay muchos competidores y pocos consumidores. Muchos lo tomaron como una moda pasajera y hoy se han volcado a las espirituosas.

¿Qué tipo de cervezas producís y qué estilos son tus favoritos a la hora de elaborar?

La producción es de cervezas ALE (fermentación alta), lo que permite consumirlas rápidamente (en 3 semanas), a diferencia de las Lager, que se utilizan en la cerveza industrial.

Tengo estilos como Kolsch, Ámbar Ale, American Pale Ale, Scottish Ales y las IPAs.

Los estilos favoritos a la hora de elaborar son las IPAs por el alto contenido de lúpulo. Estar en el ambiente y oler durante 10 horas ese aroma es un regalo, quedar impregnado todo el día del olor a lúpulo.

“Durante años emitía pólizas con la notebook abierta mientras fermentaba cerveza artesanal”

Pero lo que más me gusta es ver qué tengo entre maltas, levaduras y estilos de lúpulos y generar estilos nuevos, perfiles distintos a los de la regla y personalizarlos a mi paladar. ¡El resultado tiene que ser que me den ganas de tomarme todas las que hago!

¿Participaste en ferias?

Sí. Envié unas muestras de Stout a un concurso en Rosario y me llevé el tercer puesto.

También participé en una feria de cerveceros artesanales en Bariloche con una Ámbar Ale, y en 30 minutos mis barriles desaparecieron. Tuvo muy buena recepción entre los asistentes. Fue algo amateur, pero muy gratificante.

¿Cómo es el proceso de elaboración de tu cerveza?

Cuando perfilás qué cerveza vas a realizar, ya en tu mente sabés lo que vas a necesitar. Fui moldeando las recetas durante años hasta encontrar el perfil que necesitaba.

En base a eso, defino la malta base, alguna que otra malta especial, tipo o tipos de lúpulos a utilizar, y la levadura que necesito para llevar al extremo los sabores y aromas.

Lo primero es la higiene y sanitización. Inicio un proceso manual y semi automático lavando todos los elementos, ya que es un alimento y todo debe estar reglado para tratarse como tal. Se lavan ollas, bombas y fermentadores con un proceso de dos horas en total. Luego se sanitiza para que no se contamine el producto.

Durante la cocción, preparo el pH del agua. Después de moler las maltas, las agrego al agua preparada. Una hora después, inicio el lavado de granos para extraer la mejor densidad, y luego envío al hervor, donde se da la lupulización.

Después del hervor, paso al fermentador y agrego la levadura para darle el perfil deseado.

Luego de 24 a 48 horas, extraigo los elementos no deseados desde el fermentador cónico y paso la cerveza a un madurador. Allí decantan proteínas y otros elementos. A las tres semanas se embarrila, se gasifica ¡y se toma!

¿Usás materias primas locales o importadas?

Utilizo maltas del país, lúpulos locales (de El Bolsón) y algunos americanos, y levaduras importadas.

¿Qué consejos le darías a alguien que quiere iniciarse en el mundo de la cerveza artesanal, tanto como hobby como con fines comerciales?

Lo principal, y es aplicable a cualquier proyecto, es que no pierdan nunca el objetivo al que apuntan.

Se necesita mucho esfuerzo. Es lindo sentarse a tomar una cerveza, siempre, pero hay que disfrutar el proceso.

“Nunca pierdan las ganas de disfrutar el hobby, eso es lo más motivacional de todo”

Como todo hobby, nunca pierdan esa mirada entusiasta. Eso es lo que hace que uno llegue a otros objetivos. Nunca pierdan las ganas de disfrutarlo, eso es lo más motivacional de todo.

Y me dieron ganas de tomarme unas pintas… ¡Salud!

LOS SEGUROS

¿Qué tipo de seguros ofrecés?

A esta altura de mi carrera comercializamos todos los ramos. Me especialicé en riesgos varios y dentro de estos en los Todo Riesgo Operativo, armando una gran cartera con estos riesgos.

¿Cómo ha evolucionado el mercado de seguros desde que te iniciaste a hoy?

Evolucionó a la par de la economía. Se fue dando un mayor volumen del parque automotor, una nueva digitalización, y pospandemia se disparó notablemente la venta digital. Hoy se comercializan principalmente automotores, pero también muchos otros riesgos como caución, seguros de retiro, combinados e integrales.

Cuando comencé, el negocio era puerta a puerta. Hoy es todo más rápido, incluso personalizándose vía redes móviles y sociales.

Cervezas artesanales 

Kolsch

Refrescante y ligera. Ideal para quienes están dando sus primeros pasos en el mundo de la cerveza artesanal. Tiene ese equilibrio justo para tomarse más de una sin pensarlo demasiado.

Ámbar Ale

La estrella de la feria de Bariloche. Dulce y maltosa, con cuerpo medio y color profundo. Fue la favorita del público… y no duró más de media hora en los barriles.

American Pale Ale (APA)

Con más carácter que la Kolsch y una presencia más marcada del lúpulo. Aromática, balanceada, una compañera fiel para cualquier picada con amigos.

Scottish Ale

Oscura, suave y compleja. Un guiño a los sabores tostados y a la tradición europea. Ideal para noches frías o charlas profundas.

IPA (India Pale Ale)

La favorita del productor: mucho lúpulo, mucho aroma, mucha personalidad. Dice que el olor queda impregnado en la piel durante horas… y le encanta.