“Debemos hacer las cosas bien cada uno de nosotros y animarnos a denunciar las cosas que no están bien”

FAPASA

En el Foro Nacional del Seguro en Córdoba, la presidente de FAPASA y de COPAPROSE, Agustina Decarre, convocó al sector a comprometerse cada uno desde su lugar, fortalecer la profesionalización y construir confianza como base del sistema asegurador.

Con un discurso cargado de compromiso y esperanza, Agustina Decarre se dirigió a un auditorio repleto en el Foro Nacional del Seguro 2025, realizado en Córdoba. La presidente de la Federación de Asociaciones de Productores Asesores de Seguros de la Argentina (FAPASA) y de la Confederación Panamericana de Productores de Seguros (COPAPROSE) puso en el centro de la escena la necesidad de trabajar unidos, fortalecer la ética profesional y reforzar la confianza de la sociedad en el seguro.

Desde el inicio, la dirigente agradeció la presencia de todos los actores del sector presentes y resaltó la dimensión colectiva del seguro: “Este trabajo lo hacemos todos, es un sistema en el que todos cumplimos una función y es una maquinaria que tiene que funcionar con el compromiso de todos”.

“Somos pymes, generamos empleos, pagamos impuestos, contribuimos al crecimiento de la actividad económica del país”

En ese marco, hizo hincapié en la profesionalización como compromiso central: “Nuestro compromiso está puesto en la profesionalización de nuestra actividad, no solo en cuestiones técnicas, sino en ser verdaderos profesionales, abrazando las buenas prácticas, en hacer las cosas bien y ser ejemplo de trabajo”. Y lanzó un desafío: “Tenemos que animarnos a denunciar las cosas que no están bien. No podemos quejarnos en la mesa de café, ni en las reuniones sociales. Primero debemos hacer las cosas bien cada uno de nosotros, y después tomar las acciones institucionales que correspondan”.

Decarre también reivindicó el rol económico y social de los Productores de Seguros: “Somos pymes, generamos empleos, pagamos impuestos, contribuimos al crecimiento de la actividad económica del país. Cada día nos levantamos para construir y aportar al sector, y ese es nuestro mayor compromiso”.

En cuanto a los objetivos institucionales, enumeró tres pilares: “El primero es la profesionalización; el segundo, el posicionamiento del seguro y del rol del asesor en la sociedad; y el tercero, la conciencia aseguradora, sobre todo en las nuevas generaciones”.

Al hablar de la segunda edición de la campaña “El Arte de Cuidarnos”, que FAPASA lleva a las escuelas, resaltó: “Hablamos de valores, de cómo nos protegemos y cómo el seguro puede ser ese refugio. Cuando vemos los dibujos de los chicos, entendemos que lo más valioso para ellos son sus familias, y que el seguro aparece como una forma de protegerlas”.

Sobre la coyuntura del mercado, Decarre expresó una visión positiva: “Hoy vemos una realidad distinta. Celebramos distintas decisiones y nos esperanza mucho las resoluciones que la Superintendencia de Seguros impulsa, que hablan de control, de protección, de capitales mínimos, de sanciones entendidas no como un castigo, sino como un respaldo para los que todos los días hacen las cosas bien”.

“Nuestro compromiso está puesto en la profesionalización de nuestra actividad, en abrazar las buenas prácticas y en hacer las cosas bien”

No obstante, también admitió falencias: “No podemos desconocer que hay demoras en los pagos o directamente falta de pago de parte de algunas compañías, y problemas con la letra chica. Pero muchas veces se trata de cuestiones patológicas. Hay muchísimas compañías que trabajan todos los días muy bien y hacen un gran esfuerzo por cumplir”. 

Y añadió: “También escuchamos de personas que hacen un mal ejercicio profesional, de  colegas que no nos representan. Ahí también hay cierta patología, hay gente que está denunciada, que lamentablemente forma parte de expedientes judiciales. Pero nosotros no somos así, no lo somos, por eso estamos acá, por eso ustedes se están capacitando cada día, por eso estamos comprometidos con nuestra profesión, con la vida institucional, brindando nuestro tiempo, el de nuestras familias, el de nuestro descanso, el de nuestra propia producción comercial, para trabajar por el bienestar de todos”.

Uno de los conceptos más fuertes de su exposición fue la confianza: “La confianza es vital. Es la que depositan nuestros clientes en nosotros, y esa confianza nos obliga a estar formados, capacitados y ser éticos. Pero la confianza no se genera mágicamente, se construye cada día”. Y remarcó: “Tenemos que confiar en lo que hacemos, en lo que le mostramos a nuestros clientes, en nuestras compañías socias, y en nuestras propias instituciones”.

“La confianza no se genera mágicamente, se construye cada día, y nos obliga a estar formados, capacitados y ser éticos”

También se refirió a la desregulación de la actividad, y allí fue contundente: “No queremos ni podemos pensar en exclusividades. Tenemos que permitir ese ejercicio de la libertad. La información la llevamos nosotros con el asesoramiento. Ese es nuestro valor agregado”.

Hacia el final, su mensaje fue de unidad y esperanza: “Profesionalización, visibilidad, capacitación, conciencia aseguradora, hacer las cosas bien. Lo repetimos cada día. Todos queremos un país mejor, un país seguro, un país desarrollado. Y por suerte depende de cada uno de nosotros”.